La laparoscopia es una técnica que nos permite visualizar el interior del abdomen y la pelvis por medio de un endoscopio.
Es una prueba que se realiza normalmente con anestesia general, de esta manera no te enterarás de nada porque permanecerás dormida toda la prueba. No vas a sentir ningún dolor.
La preparación de la prueba es muy sencilla:
- No debes comer ni beber durante las 8 horas previas a la prueba.
- Debes seguir todas las instrucciones que te mande el ginecólogo.
El procedimiento se lleva a cabo de la siguiente manera:
El ginecólogo te realizará una incisión debajo del ombligo a través de la cual pasaremos el laparoscopio (es una videocámara muy pequeñita) y poder ver mejor el interior de la pelvis o abdomen, si fuera necesario el especialista podrá hacer dos incisiones a cada lado del abdomen por si se hace necesario la visión de ciertos órganos.
Por medio de las incisiones el ginecólogo introducirá dióxido de carbono en el abdomen para que se vea con mayor claridad los órganos a examinar.
A través de la prueba con laparoscopia podemos diagnosticar una esterilidad en la mujer, detectar cáncer de ovarios, embarazos ectópicos, etc.
Es una prueba ambulatoria, por lo que te irás a tu casa cuando te recuperes, siempre que no ocurra cualquier imprevisto.
Necesitarás un poco de reposo y una dieta un poco más ligera tras la laparoscopia.
Durante unos días es mejor no hacer deportes o esfuerzos, etc.
Si tienes que realizarte una laparoscopia ponte en contacto con la Clínica Sergine Médica y te citaremos con nuestro especialista.